quarta-feira, 31 de outubro de 2007

Pensamiento del Pueblo Waorani para el futuro

Antiguamente nuestros abuelos caminaban por todo nuestro territorio protegiéndolo en sus límites y enseñándonos los caminos, los ríos y los lugares donde están enterrados nuestros antepasados. El padre puma era el sabio espiritual, adivino y curador que tenía toda la magia que guiaba a nuestro pueblo y nos daba el poder para ser guerreros y vivir en bosque. El poder de los padre pumas defiende nuestro territorio.

Desde que llegaron los misioneros trataron de acabar con nuestras creencias, y nuestras tradiciones casi desaparecieron. Luego las empresas petroleras ingresaron a nuestras tierras contaminando y destruyendo la tierra. Cuando nos dimos cuenta, nuestras tierras estaban ocupadas y las familias dividas, entonces tratamos de recuperar nuestro territorio para volver a vivir como nos enseñaron nuestros abuelos.

Desde que nos dijeron que somos ecuatorianos hemos tratado de compartir los recursos con todos el Ecuador, pero no hemos sido beneficiados de esta explotación, no se han hecho políticas que nos respeten como nacionalidad indígena.

A mi me contaron que cuando nosotros morimos nos convertimos nuevamente en animales del bosque, en jaguares y anacondas. Y cuando entran las petroleras y las iglesias destruyen todo, acabando con nuestros espíritus y nuestros ancestros, cambiando nuestra cultura y tradiciones.

Actualmente existen siete empresas petroleras que contaminan y destruyen el bosque en el que vivimos. Además estas compañías dividen a las familias y causan enemistades entre hermanos, debido a las nuevas necesidades que se han creado. Las empresas no cumplen con los ofrecimientos que hacen, llevan militares a nuestras comunidades para vigilar los pozos y campamentos. Por las carreteras petroleras entran madereros ilegales que sacan madera de nuestro territorio.

Para nosotros es muy importante que se respete en su totalidad el territorio ancestral donde viven y sueñan los pueblos Tagaeri-Taromenane, que nadie ingrese a sus tierras ni roben sus recursos, que el Estado garantice que ellos puedan vivir en paz, con sus tradiciones, creencias y costumbres como siempre lo han echo. Que no les invadan las compañías petroleras, turistas, científicas, madereras, religiosos, Ong's de conservación, etc. Para nosotros nuestros hermanos son el último pueblo libre en la selva y pedimos al gobierno ecuatoriano que se solidarice con nuestro sentir y que respete a los pueblos Tagaeri-Taromenane.

Tengo muchas historias e ideas que contarles pero este espacio es muy pequeño para la larga historia de mi pueblo. Pero nosotros seguiremos viviendo en el bosque y no nos dejaremos callar. Mis abuelos eran fuertes guerreros que no dejaron entrar a los extraños , pero ahora yo soy amigo de otros pueblos y quiero que luchemos juntos para proteger mi territorio y el de mis hermanos Tagaeiri – Taromenane que viven en libertad y sin contacto con esta civilización.

Atentamente, Moi Enomenga

Para saber mais e ler a carta acima na íntegra, acesse http://www.amazoniaporlavida.org/

Um comentário:

Anônimo disse...

Já se fez projeção do planeta sem a humanidade. A natureza agradece.
O fato é que consciência não nasce em pedras, mas quando algumas pedras caírem sobre a cabeça dos homens, talvez a natureza e os povos, de um modo geral, passem a ser mais e melhor respeitados. Espero que um dia possamos pensar duas vezes antes de retirar um bonito seixo do leito de um rio, antes de interferir na morada dos outros, sejam estes outros pedras, plantas, bichos ou gente.